22-05-2017
El plan promete cambiar la fisonomía del Barrio 31, en Retiro y Recoleta. Se trata de la modificación de la traza de la Autopista Illia, para generar un corredor verde y sumar accesos y salidas para el tránsito. El Gobierno porteño comienza la construcción del nuevo recorrido de la Illia, que ya no atravesará las Villas 31 y 31 bis, y permitirá su integración.
Si bien los trabajos no afectarán los ingresos actuales a la Illia, desde hoy la empresa estatal Autopistas Urbanas (AUSA) cerró la calle Facundo Quiroga (ver Mapa), entre la avenida Callao y el Centro de Exposiciones y Convenciones (a la altura de Pueyrredón).
Mapa. La zona cortada desde hoy y las vías alternativas. (AUSA)
Como alternativa, los automovilistas deberán desviarse por Del Libertador y Figueroa Alcorta. En tanto, para facilitar la accesibilidad al tramo de Quiroga que no está siendo intervenido, esta arteria pasará a ser doble mano entre la Facultad de Derecho (Austria) y Pueyrredón.
La obra consiste en construir una nueva vía rápida entre la 9 de Julio y el peaje de Retiro (el cual no se verá afectado). Este trayecto se extiende por 1.900 metros y tendrá un tramo a nivel y otro elevado, con siete carriles: tres hacia la Provincia y cuatro rumbo al Centro. Además, sumará tres accesos desde Carlos Pellegrini, Del Libertador y Callao, y cuatro bajadas en Rodríguez Peña, Callao, Libertad y Cerrito.
Video: cómo será la nueva traza
Según cálculos oficiales, la incorporación de bajadas y subidas ayudará a descomprimir la circulación en la 9 de Julio. De los 6 mil autos que ingresan por hora a la avenida céntrica, estiman que luego serán sólo 2.500 vehículos.
Los trabajos, que demandarán un año y medio, se dividirán en dos etapas bien definidas. El primer tramo modificará la configuración actual de Quiroga entre Carlos Pellegrini y el nuevo Centro de Exposiciones y Convenciones. La otra par- te seguirá desde allí hacia el norte, donde la avenida tomará altura para convertirse en un viaducto y girar hacia el norte, pasando por arriba de las vías del ferrocarril hasta empalmar con la AU Illia existente.
Una vez que se inaugure el recorrido futuro, se creará un parque lineal en la vieja autovía que contará con espacios verdes, bicisendas y transporte público. El diseño definitivo será el producto de un concurso público. Este será un gran paso para avanzar con la urbanización de la Villa 31, donde el Ejecutivo porteño se comprometió a construir 1.000 viviendas para los vecinos que dejen el bajo autopista, más la llegada de cloacas, agua corriente, veredas, calzada e iluminación.